– El próximo martes 20 de diciembre en Ibercaja (San Ignacio de Loyola, 16), tendrá lugar una conferencia sobre la esclavitud infantil. El acto comenzará a las siete y media de la tarde y estará a cargo de Raquel Martínez, ingeniera de Caminos, y Rodrigo Lastra, médico, ambos responsables de la Campaña por la Justicia Norte Sur.
Bajo el título “Esclavitud infantil, canallada real”, los ponentes analizarán la situación de millones de niños de países del Tercer Mundo, esclavizados y explotados por adultos, a veces por su propia familia, que los obliga a trabajar a corta edad, a prostituirse, a cambio de comida y poco más, o a empuñar un fusil en los países en guerra. Sobre la situación de la infancia en el mundo, sobre la responsabilidad de gobiernos, políticos, sindicalistas, consumidores, y sobre iniciativas solidarias de ayuda a la infancia, tratará esta conferencia organizada por la Obra Social y Cultural de Ibercaja.
Raquel Martínez Andrés, una de los dos ponentes, es ingeniera de Caminos. Lleva 9 años trabajando a nivel nacional en la Campaña por la Justicia en las relaciones Norte-Sur. Gran conocedora del tema, es autora del libro Esclavitud infantil, canallada real.
El médico Rodrigo Lastra del Prado, es coordinador de la Campaña por la Justicia en las relaciones Norte-Sur en Aragón, colaborador habitual de la editorial “Voz de los sin Voz” y coautor del libro Esclavitud infantil, canallada real.
Ambos pertenecen al Movimiento Cultural Cristiano, asociación de la iglesia católica, que lleva más de 25 años denunciando los grandes problemas de la humanidad y sobre todo, sus causas, a través de la Campaña Permanente por la Justicia Norte-Sur. La difusión de una cultura solidaria que genere opinión pública sobre los problemas de los empobrecidos de la tierra es una de sus aportaciones a la sociedad.
INFANCIA EXPLOTADA
Según informes del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en el mundo hay alrededor de 400 millones de niños que vive en condiciones de esclavitud. Aunque es en África donde el problema es más grave, ya que al menos uno de cada tres niños africanos trabaja, hay países de América Latina, como Haití, donde trabaja el 25 por ciento. Le siguen Guatemala, Brasil y República Dominicana, con más del 16% de su población infantil empleada en distintos trabajos.
El problema se agrava en Asia, donde sólo en Pakistán, ocho millones de niños menores de 14 años son explotados por sus amos en canteras, fábricas de ladrillos o en la elaboración del tabaco. Por otra parte existen en el mundo más de trescientos mil niños y niñas soldados, entrenados exclusivamente para matar, mientras más de un millón de niñas son explotadas sexualmente.
EL CASO DE IQBAL MASHIB
El 16 de abril de 1995 moría asesinado Iqbal Mashib. Iqbal era un niño pakistaní de 12 años, que trabajó como niño esclavo, desde los 4 años, para las mafias textiles de su país.
Junto con otros niños sindicalistas, consiguió la libertad y comenzó una lucha asociada para la liberación de los millones de niños esclavos que hay en el mundo. Esto le llevó al reconocimiento internacional, hablando ante parlamentos y universidades de Norteamérica y Europa, denunciando la responsabilidad que los habitantes del Norte del planeta tienen en la miseria de la infancia del Sur. No se lo perdonaron, y a su regreso, la mafia textil le asesinó el domingo de resurrección de 1995.
Su muerte puso de manifiesto ante el mundo la existencia de más de 400 millones de niños que viven bajo las más diversas formas de esclavitud. Diez años después, la mecha encendida por este niño luchador prende por todo el mundo y se multiplican los actos e iniciativas para abolir la esclavitud infantil y para pedir que el 16 de abril sea declarado Día Mundial contra la Esclavitud Infantil.
