·La entidad aporta 100.000 euros para la Escuela de Hostelería TOPI y el Aula Taller de Fontanería, Albañilería y Soldadura TOPI
·El objetivo prioritario de esta organización es la inserción social y laboral de jóvenes
Convenio con el TOPI María Teresa Soro Andiano, directora gerente de la Fundación Picarral, José Luis Aguirre, director general de Ibercaja y Ramón Alcala, jefe de la Obra Social y Cultural de Ibercaja firman el convenio en la sede del TOPI.
(ZARAGOZA, 1 DE JUNIO DE 2007).- La Fundación Picarral e Ibercaja continúan colaborando por décimo año consecutivo en la formación y en el fomento del empleo entre los jóvenes zaragozanos con una escasa motivación para continuar estudiando, pero con deseos de aprender una profesión y encontrar un puesto de trabajo que, en el mayoría de los casos es su primer empleo. Durante el año 2007, la entidad de ahorro aportará 100.000 euros para el mantenimiento de los talleres de Fontanería, Albañilería y Soldadura (TOPI-1) y para la Escuela de Hostelería (TOPI-2).
El convenio ha sido firmado José Luis Aguirre, director general de Ibercaja, y de María Teresa Soro Andiano, directora gerente de la Fundación Picarral, en la sede del TOPI.
La experiencia, credibilidad y resultados de esta Fundación en la formación, búsqueda de un empleo y firma del contrato de trabajo entre un colectivo de jóvenes es una de las razones de la estrecha relación de Ibercaja con esta organización sin ánimo de lucro desde hace diez años.
En el Aula Taller TOPI-1, durante el presente curso están matriculados 30 alumnos, de 14 y 15 años. Este taller imparte durante dos años las especialidades de Fontanería, Albañilería y Soldadura. Fuentes de la Fundación señalan que, utilizando las medias de los últimos años, el 70% de los alumnos del TOPI-1 encuentran trabajo como aprendices, una vez finalizado el periodo de los dos años de estudio. El 30% restante se reincorpora al sistema escolar reglado sin ninguna dificultad, ya que han adquirido un grado mayor de autoestima, han incrementado la cultura del esfuerzo y, además, siguen siendo muy jóvenes, 16 años, con lo cual tienen un camino amplio para seguir formándose en las aulas. Las empresas demandan cada año a la Fundación Picarral una media de 50 aprendices, entre las tres especialidades, para incorporarlos a la actividad laboral.
El otro módulo formativo de la Fundación Picarral es el TOPI-2 o Escuela de Hostelería. Para jóvenes entre 16 y 25 años, tras dos años de estudios, los alumnos salen con la especialidad de ayudantes de Cocina o Camareros. El 90% de estos jóvenes, una vez finalizado el periodo de estudios y con el título en la mano, se insertan en el mercado laboral casi de forma instantánea. La Fundación recibe cada año alrededor de 400 ofertas de empleo por parte de las empresas de hostelería y restauración.
La Fundación Picarral fue fundada en 1992 y sus promotores fueron los miembros Asociación de Vecinos del barrio del Picarral. El patronato está integrado por siete personas: tres representan a la asociación de vecinos y, los cuatro restantes, uno procede de los consejos parroquiales de la Margen Izquierda, otro del voluntariado de la propia fundación, otro de los trabajadores de la misma y el último representa a los responsables de las empresas de inserción y centros especiales de empleo participados por la Fundación Picarral.
Otra de las actividades de la Fundación Picarral, además de las llamadas viviendas tuteladas, es el proyecto Serpi, que ofrece formación a los jóvenes con inteligencia límite.