Simone Ortega

Nació en Barcelona en el seno de una familia de origen francés establecida a finales del siglo XIX en la Ciudad Condal. Pero, a causa de las huelgas promovidas por los anarquistas en 1919, su padre decidió trasladar la fábrica de caucho que tenía con sus hermanos a Segovia, un lugar más tranquilo, ajeno a los conflictos sociales y cerca de Madrid. En la capital instaló a la familia para que sus hijos pudieran estudiar en el Liceo Francés.

La familia pasaba los veranos en Bandol, un pueblecito, cuna de un delicioso vino, cercano a Marsella, por lo que al estallido de la Guerra Civil Española, los Klein decidieron permanecer en la Costa Azul, estableciéndose en Niza, donde los abuelos de Simone pasaban los inviernos. Sin embargo, Simone, al poco tiempo, regresó a España, pasando a San Sebastián cuando fue tomada por las tropas navarras en septiembre de 1936.

En la capital guipuzcoana cosió para la intendencia y fue enfermera profesional y, cuando por fin finalizó la contienda, regresó a Madrid para recomenzar su vida, aunque con la pena de no haber podido estudiar una carrera universitaria debido a las vicisitudes vividas. En Madrid se casó con Fernando Gálvez-Cañero, pero enviudó a los tres años. Asimismo, en Madrid conoció al que sería su segundo marido: José Ortega Spottorno, fundador de Alianza Editorial y el periódico El País, tareas que compaginó durante años con la dirección de la editorial y la publicación de Revista de Occidente, que había fundado su padre, José Ortega y Gasset. Tuvo tres hijos: José, Inés y Andrés. Pensando que una buena mesa une a la familia, comenzó a preparar platos de un cuaderno de recetas heredado de su abuela bourguiñona.

Pero, dadas las ocupaciones profesionales de su marido, recibía en su casa con cierta asiduidad gran número de comensales, por lo que el recetario se fue ampliando indistintamente con platos franceses y españoles que se esmeraba en preparar con el mismo empeño como lo había hecho para su propia familia. José Ortega le sugirió entonces que recogiera en un libro tan esmerada cocina que, después de probar todas las recetas para ajustarlas lo mejor posible a los nuevos tiempos y vigilar los más mínimos detalles, vio la luz con el título de 1080 recetas de cocina, que introdujo la colección de libros de bolsillo de Alianza Editorial. Firmó el libro con el apellido de su marido, por lo que, como escritora gastronómica y en todo lo relacionado con la cocina y la buena mesa, ha pasado a ser más conocida como Simone Ortega. El éxito alcanzado con más de dos millones y medio de libros vendidos demuestra que es una de las autoras más leídas, publicadas y vendidas.

Sólo en edición de bolsillo se han hecho más de cuarenta y ocho ediciones, sin contar las ediciones de tapa dura y de lujo.

La publicación de otros libros de recetas de cocina, además de colaborar en programas de radio, prensa y televisión, le han valido numerosos premios y condecoraciones, como el Premio Amavi, el Premio Especial de Gastronomía de 1987 otorgado por la Academia Española de Gastronomía y la Cofradía de la Buena Mesa, el Premio Restauradores en el año 2000, la Medalla francesa de Chevalier des Arts et des Lettres en enero de 2006, el Premio Especial Alimentos de España en su edición 2006 en reconocimiento a toda su vida profesional, así como un gran acto homenaje en el Salón de la Alimentación de Barcelona de 2007.

Falleció en Madrid, tres semanas antes de cumplir los ochenta y nueve años, y con toda seguridad será recordada como ella deseaba cuando afirmó que “desearía que me recordasen como alguien que ha contribuido a mejorar la cocina de todos los días”.

Inés Ortega Klein