El Museo Goya de Fundación Ibercaja incorpora en marzo de 2021, coincidiendo con el 275 aniversario del nacimiento del pintor universal, una obra procedente de una colección privada. Se trata del lienzo "San Ignacio de Loyola" pintado por Francisco de Goya en 1775, en el que representa al fundador de la Compañía de Jesús, San Ignacio de Loyola, de medio cuerpo, girado y mirando al espectador.

Según la catalogación realizada por el experto en Pintura Antigua Javier López Serrano, viste el hábito de la orden y en sus manos porta un libro con una inscripción: "ad maiorem dei gloriam" ("a la mayor gloria de Dios").

Goya debió pintar esta obra justo antes de abandonar Zaragoza o en los primeros momentos de su estancia en la Corte, y tradicionalmente se ha aceptado que fue un encargo para Juan Ignacio Ezcurra (1750-1827), por la coincidencia con su nombre y por haber permanecido con sus herederos hasta los años 70 del siglo XX.

En la obra, realizada tras el periodo de formación de Goya en Italia, se observa la "maestría" del pintor, principalmente en la profundidad de la mirada del santo, su expresividad y emotividad; la forma de iluminarlo, resaltando el halo de santidad sobre el fondo abstracto; y la construcción a base de pinceladas seguras, el uso de veladuras y el color.

La pintura se exhibe en la Sala principal del Museo, en el mismo ámbito que el resto de las obras del aragonés genial. Con esta incorporación, el Museo refuerza su vocación de ser foco de difusión y promoción de la obra de Francisco de Goya.
 

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